Las crisis económicas no son una novedad, pero cada generación vive la adversidad de forma diferente. La pandemia, la inflación elevada y la tensión geopolítica han dejado claro que tener una estrategia financiera flexible es más importante que nunca. Invertir bien en tiempos de incertidumbre es posible si se entiende cómo proteger el bolsillo y adaptarse a los cambios.
La inflación promedio en México en 2025
Hoy México mantiene una inflación promedio cercana al 4.5% anual, de acuerdo con cifras recientes de Banxico. Aunque menor que hace un par de años, sigue superando la meta de 3% y afecta directamente el poder adquisitivo de los ingresos. A esto se suma que las tasas de interés se mantienen altas para controlar la inflación, lo que encarece créditos hipotecarios, préstamos personales y tarjetas. En Estados Unidos, la situación es parecida: la inflación ronda el 3% y la Reserva Federal mantiene tasas elevadas, lo que impacta a los mercados internacionales y a la paridad peso-dólar.
La mejor defensa contra la crisis
En este contexto, la mejor defensa es un fondo de emergencia sólido. Muchos expertos coinciden en guardar de tres a seis meses de gastos esenciales en instrumentos líquidos y seguros. CETES o pagarés bancarios ofrecen rendimientos cercanos al 9% anual, superiores a cuentas de ahorro tradicionales, y permiten disponer del dinero rápidamente. Tener este colchón evita endeudarse más si se presenta un imprevisto, como la pérdida de empleo o una emergencia médica.
Una vez cubierto el fondo de emergencia, se vuelve clave diversificar con activos que ayuden a mitigar riesgos. El oro, por ejemplo, sigue siendo uno de los refugios tradicionales cuando la inflación se dispara o los mercados se vuelven inestables. Aunque no paga intereses, suele mantener su valor relativo y contrarrestar la pérdida de poder adquisitivo. Otra opción es dolarizar parte del portafolio, especialmente cuando hay señales de que el peso podría depreciarse frente a escenarios globales adversos.
Los bienes raíces
Los bienes raíces son otro pilar en épocas inciertas, pero con matices. Comprar una propiedad implica comprometerse con un crédito, algo que puede ser riesgoso si las tasas se mantienen altas. Para perfiles con menor capacidad de endeudamiento, las FIBRAs o el crowdfunding inmobiliario pueden ofrecer una exposición más flexible y menor compromiso financiero. Esto permite generar ingresos por rentas y diversificar sin descapitalizarse.
Un caso realista es el de Sofía y Manuel, una pareja con ingresos medios y dos hijos. Conscientes de que sus créditos hipotecarios tienen tasas fijas, revisaron sus otras deudas y refinanciaron un préstamo personal para reducir pagos mensuales. Además, incrementaron su fondo de emergencia a cinco meses de gastos básicos, invirtieron un 50% en CETES y pagarés de corto plazo, 20% en dólares mediante una cuenta internacional, 15% en un ETF de oro y 15% en crowdfunding inmobiliario. Así distribuyen sus riesgos, aseguran liquidez y conservan potencial de crecimiento moderado.
Mayores errores financieros en época de crisis
Uno de los mayores errores en tiempos de adversidad es tomar decisiones impulsivas. Muchas personas venden sus inversiones cuando los mercados caen, asustadas por titulares alarmistas. Esto corta la oportunidad de recuperación que suele venir después de cada ciclo de crisis. Por eso, entender que invertir es de mediano y largo plazo es fundamental. La información verificada y la asesoría de expertos son clave para filtrar rumores y evitar fraudes.
Además de invertir, es igual de importante poner en orden las finanzas del día a día. Revisar créditos, renegociar tasas si es posible, eliminar gastos innecesarios y buscar fuentes de ingreso adicionales fortalece la estabilidad familiar. Tener un plan B laboral, como freelancear o monetizar un hobby, también suma.
Aunque la adversidad mundial parece un obstáculo, también es una oportunidad para reflexionar sobre hábitos de consumo y mejorar la educación financiera. Quienes salen más fuertes de una crisis no son los que tienen más recursos, sino quienes saben planear, informarse y mantener la calma. Blindar el bolsillo hoy es cuidar la tranquilidad de mañana y abrir camino para seguir creciendo cuando lleguen tiempos mejores.








